Gaceta Crítica

Vladimir Markhonov (BOLETÍN DE LOS CIENTÍFICOS ATÓMICOS DE EEUU), 4 de Diciembre de 2025

Impresión artística del misil de ataque de precisión de largo alcance (PrSM) de próxima generación del Ejército estadounidense. Si este u otros sistemas avanzados de misiles balísticos de corto alcance se desplegaran y lanzaran desde bases en el norte de Finlandia o Noruega, Rusia apenas tendría medidas de protección que implementar y no tendría tiempo para lanzar ataques de represalia desde portamisiles y submarinos anclados en la región. (Crédito: Lockheed Martin)Compartir

Al invadir Ucrania en 2014 y de nuevo en 2022, Rusia ha generado tensiones devastadoras en el equilibrio de poder global. También ha abierto nuevas fronteras de tensión, algunas visibles a simple vista y otras más difíciles de discernir, pero todas sumamente desagradables para Moscú.

El espectacular ataque de Ucrania en junio contra bombarderos rusos en bases aéreas del norte y el oeste de Rusia, utilizando drones económicos, ha revelado nuevas amenazas a la capacidad estratégica de Rusia y la ha obligado a reubicar sus bombarderos en bases del Lejano Oriente. Las recientes decisiones de Finlandia y Suecia de unirse a la OTAN y los acuerdos de cooperación en materia de defensa entre los países nórdicos y Estados Unidos también han puesto en riesgo las fuerzas navales de la Flota del Norte de Rusia. Estas fuerzas no pueden reubicarse fácilmente, lo que aumenta el riesgo de una crisis de misiles en el noroeste de Rusia, cerca del mar de Barents. En resumen, diversos acuerdos militares otorgan a Estados Unidos la capacidad de desplegar rápidamente misiles en Noruega y Finlandia que podrían alcanzar la Flota del Norte de Rusia y otros activos estratégicos en cuestión de minutos.

Cualquier decisión de realizar tal despliegue podría crear una situación de Crisis de los Misiles de Cuba entre la OTAN y Rusia que podría conducir a una guerra.

Bases navales del norte de Rusia. La flota rusa de submarinos de misiles balísticos de propulsión nuclear y armamento nuclear —parte importante de la tríada nuclear rusa— está dividida prácticamente a partes iguales entre la Flota del Norte (en el océano Ártico) y la Flota del Pacífico. Históricamente, las bases de la Flota del Norte han presentado una grave vulnerabilidad estratégica debido a las características geográficas y climáticas de la parte rusa del mar de Barents, donde se ubican. Estas bases se concentran en la región de Múrmansk, en la península de Kola, la zona más noroccidental de Rusia. La región limita al noroeste con Noruega, al oeste con Finlandia, al noreste con el mar de Barents, al sureste con el mar Blanco y al suroeste con una estrecha franja que conecta con la Rusia continental.

Trasladar estas bases navales más al este es prácticamente imposible, ya que la Corriente del Golfo solo impide la congelación de una zona limitada del mar de Barents durante todo el año, aproximadamente hasta el cabo Svyatoy Nos, situado al oeste de la entrada al mar Blanco. Todo lo que se encuentra más al este se congela en invierno, aunque la extensión y la duración de la congelación estacional varían cada año, y el hielo marino está disminuyendo en el mar de Barents debido al calentamiento superficial de la Corriente del Golfo . Por lo tanto, las bahías más convenientes para que Rusia base su flota se encuentran al oeste de la bahía de Kola, en las costas más cercanas a Noruega y Finlandia.

Una geopolítica compleja en torno al Mar de Barents. La OTAN se ha expandido hasta la frontera rusa en el Círculo Polar Ártico desde la guerra en Ucrania. Mapa: François Diaz-Maurin y Erik English / Datawrapper .

Principales instalaciones de la Flota del Norte de Rusia

Lista de las principales instalaciones de la Flota del Norte de Rusia en la región de Murmansk, de oeste a este, según la información disponible públicamente:

• Zapadnaya Litsa es una antigua base para los submarinos nucleares con misiles balísticos de clase Akula (Tifón), actualmente base para los submarinos nucleares con misiles de crucero de clase Yasen y Oscar II. El sitio también alberga ojivas nucleares y residuos radiactivos. Se encuentra a unos 55 y 115 kilómetros de las fronteras con Noruega y Finlandia, respectivamente.
• Vidyaevo es una base para submarinos multipropósito ubicada aproximadamente a 80 kilómetros y 140 kilómetros de las fronteras con Noruega y Finlandia, respectivamente.
• Gadzhiyevo es la base principal de los submarinos lanzamisiles balísticos de clase Borei y clase Delta en la bahía de Yagelnaya. La base también cuenta con un almacén de ojivas nucleares. Se encuentra a unos 100 y 160 kilómetros de las fronteras con Noruega y Finlandia, respectivamente.
• Severomorsk es la base principal de la flota de superficie, que incluye rompehielos de propulsión nuclear, la aviación naval (Severomorsk-1) y el cuartel general de la Flota del Norte. El emplazamiento también cuenta con un aeródromo cercano, actualmente cerrado (Severomorsk-2), así como otra base que alberga un almacén de ojivas nucleares y un aeródromo de bombarderos estratégicos (Severomorsk-3). Se encuentra a aproximadamente 110 y 170 kilómetros de las fronteras con Noruega y Finlandia, respectivamente.
• Múrmansk . La ciudad de Múrmansk se encuentra a unos 110 y 160 kilómetros de las fronteras con Noruega y Finlandia, respectivamente.

La moderación de la Guerra Fría ha terminado. Durante la Segunda Guerra Mundial y la posguerra, toda la infraestructura de la Flota del Norte rusa se construyó alrededor de Múrmansk, el único puerto del norte de Rusia libre de hielo y con buenas conexiones ferroviarias. En aquel entonces, esta proximidad a Finlandia y Noruega era poco importante. Pero con el fortalecimiento de los lazos militares entre los países nórdicos y los Estados Unidos y el desarrollo de misiles de corto alcance, la ubicación de la Flota del Norte se convirtió en un verdadero peligro para ambos bandos, ya que los misiles podían desplazarse rápidamente y cargarse en barcos y submarinos.

Finlandia mantuvo su estatus neutral durante la Guerra Fría y estaba vinculada a la Unión Soviética por varios tratados internacionales. Noruega, que se había unido a la OTAN en 1949 pero tenía numerosos intereses superpuestos con Rusia en el mar de Barents, impuso voluntariamente restricciones a las fuerzas terrestres y los vuelos aéreos de la OTAN en el área de Finnmark al este del fiordo de Porsanger, que limita con Rusia. Esta moderación autoimpuesta ayudó a Noruega a firmar un acuerdo de demarcación de fronteras marítimas con Rusia en 2010 en términos que algunos expertos rusos consideraron favorables a Oslo . Los halcones en Rusia incluso acusaron al entonces presidente Dmitriy Medvedev de traicionar los intereses rusos después de firmar el tratado. ^[1] Pero quizás uno de los beneficios para Rusia fue la continuación de la política fronteriza de moderación de Noruega , que Oslo había observado hasta mayo, cuando comenzó a flexibilizar estas restricciones al entrenamiento de la OTAN , y septiembre, cuando permitió que un avión no tripulado de vigilancia operado remotamente Global Hawk de la Fuerza Aérea de los EE. UU. sobrevolara Finnmark , lo que generó algunas preocupaciones.

Probando los límites en el Círculo Polar Ártico. El 3 de septiembre de 2025, un Global Hawk sobrevoló la región noruega de Finnmark, al este del fiordo de Porsanger. Fue la primera vez que un dron militar estadounidense utilizó el corredor que va del norte de Finlandia a Noruega. Mapa: François Diaz-Maurin y Erik English / Flightradar24 /  Datawrapper .

Además de las bases navales, al sur de Múrmansk, la base aérea de Olenya, atacada por drones ucranianos en junio , alberga bombarderos estratégicos rusos. A unos 20 kilómetros al este de dicha base se encuentra un radar de alerta temprana de defensa antimisiles (Olenegorsk-1); también hay un almacén de ojivas estratégicas en las cercanías (Olenegorsk-2), a menos de 160 kilómetros de la frontera con Finlandia. (En estas instalaciones se realizaron las comprobaciones finales antes de que un bombardero Tu-95 modificado, que portaba la Bomba del Zar (el arma termonuclear más grande del mundo jamás probada), despegara de la base aérea de Olenya con destino a la isla ártica de Nueva Zembla el 30 de octubre de 1961. Al explotar, la bomba liberó una potencia explosiva de aproximadamente 50 megatones de equivalente de TNT ).

Más allá de la OTAN. Desde que las tropas rusas invadieron Ucrania, la situación en las fronteras nórdicas con Rusia se ha vuelto extremadamente tensa . Atemorizados por el descarado ataque ruso, los países nórdicos comenzaron a explorar cómo fortalecer la seguridad de sus fronteras con Rusia por todos los medios posibles. Finlandia y Suecia solicitaron su ingreso a la OTAN y se unieron a la alianza en 2023 y 2024, respectivamente. Quizás no menos significativo, los países nórdicos —Dinamarca , Finlandia , Suecia y Noruega ^[2] — han firmado Acuerdos de Cooperación en Defensa (ACD) bilaterales con Estados Unidos. (El tratado con Noruega entró en vigor en 2022, con Suecia, Dinamarca y Finlandia en 2024 y 2025).

Según estos acuerdos, Estados Unidos tiene acceso sin trabas a las instalaciones militares acordadas y al uso de la infraestructura de transporte, los aeropuertos y el espacio aéreo de sus países socios. Además, Estados Unidos puede colocar equipo militar, armas y personal en estas instalaciones previa notificación, y puede construir nuevas instalaciones en zonas designadas con el acuerdo de las autoridades del país. Los acuerdos tienen una duración de 10 años y pueden prorrogarse. Sin embargo, estos acuerdos son hasta cierto punto asimétricos: si bien puede utilizar la infraestructura de los países socios, Estados Unidos no asume formalmente ninguna obligación de defensa colectiva en caso de un ataque contra ellos, como se establece en el Artículo 5 del tratado fundacional de la OTAN.

Estos acuerdos de cooperación en materia de defensa no son nuevos en Europa. Estados Unidos ya los tiene vigentes con varios países de Europa del Este, como Polonia, Rumanía, Eslovaquia, Bulgaria, Letonia, Lituania y Estonia. En Rumanía y Polonia, el marco de estos acuerdos incluye el despliegue de los sistemas de defensa antimisiles Aegis. Sin embargo, los países del norte de Europa no habían participado en tales acuerdos hasta hace poco. Ahora, con estos nuevos acuerdos, Estados Unidos podrá desplegar rápidamente sus fuerzas armadas —que podrían incluir sistemas de defensa antimisiles— a lo largo de toda la frontera occidental de Rusia; y podrá hacerlo independientemente de los mecanismos de la OTAN.

Gracias a estos acuerdos heredados de la administración anterior, el presidente Donald Trump podría sentirse seguro de su presión sobre la OTAN. Para las fuerzas armadas estadounidenses, estos acuerdos crean una oportunidad alternativa para desplegar fuerzas militares en Europa con pocas restricciones u obligaciones. A diferencia de los mecanismos de la OTAN, los Acuerdos de Coordinación de Defensa (DCA) son bilaterales y no requieren la firma de otras partes para un mayor despliegue de fuerzas estadounidenses. En total, Estados Unidos ahora tiene acceso a 47 instalaciones en el norte de Europa, incluyendo un gran número de aeropuertos y bases navales.

Como Noruega no permitió a Estados Unidos acceder a ninguna de sus instalaciones militares en la zona excluida de Finnmark, el ingreso de Finlandia a un DCA con Estados Unidos resultó atractivo para Washington, ya que le dio acceso a varias instalaciones importantes en Laponia, la región más septentrional de Finlandia, que está inmediatamente adyacente a las regiones rusas de Murmansk y Olenegorsk.

Una de esas instalaciones finlandesas a la que Estados Unidos puede acceder ahora, la Base de la Guardia Fronteriza ubicada en Ivalo, está situada a unos 40 kilómetros de la frontera rusa y a menos de 200 kilómetros de Murmansk y Olenegorsk.

Aunque hasta ahora era casi desconocida, la pequeña ciudad finlandesa de Ivalo podría convertirse en un nuevo foco de tensión en cualquier crisis que involucre a las fuerzas de la OTAN y a la flota nuclear rusa.

El despliegue en la base de varias docenas de lanzadores móviles con sistemas de misiles tácticos del Ejército estadounidense (ATACMS) o misiles de ataque de precisión (PrSM), con un alcance de 300 a 500 kilómetros, respectivamente, podría completarse en tan solo uno o dos días, dada la capacidad de los aeropuertos de Finlandia, Suecia y otras partes de Escandinavia, a través de los cuales Estados Unidos ahora puede transportar equipo y personal. Por ejemplo, el aeropuerto internacional de Ivalo cuenta con una pista lo suficientemente larga para grandes aviones de transporte militar, incluidos los C-130 Hércules y C-5 Galaxies de Lockheed, ambos capaces de transportar lanzadores móviles de misiles ATACMS y PrSM.

En una crisis, estos lanzadores podrían transportarse y desplegarse rápidamente cerca de la frontera rusa; de ser necesario, podrían atacar todas las bases de submarinos nucleares rusos de la Flota del Norte, así como otras instalaciones nucleares estratégicas de la región. A tan corta distancia, los misiles estadounidenses tendrían un tiempo de vuelo de tres a cinco minutos, lo que, para los misiles balísticos intercontinentales, corresponde únicamente a la duración de la primera fase de impulso. Esto significa que Rusia apenas tendría medidas de protección que emplear si estos misiles se lanzaran desde Laponia. Los sistemas modernos de defensa aérea pueden derribar misiles balísticos, generalmente durante sus fases intermedias o terminales, pero con varias limitaciones y de forma poco fiable. La capacidad de los lanzadores móviles para cambiar rápidamente de ubicación complica aún más la tarea de interceptación.

Riesgo de una crisis de misiles en el Norte. Un submarino pasa mucho tiempo en el muelle para operaciones de carga, reparación y mantenimiento. El tiempo de mantenimiento de los submarinos rusos siempre ha sido mayor que el de los estadounidenses. Para aumentar la disponibilidad de sus submarinos, la doctrina militar rusa considera que un submarino en el muelle está en servicio de combate si su equipo y tripulación están listos para iniciar los preparativos previos al lanzamiento. Esto permite al submarino lanzar misiles balísticos o de crucero directamente desde el muelle si es necesario.

Un misil balístico intercontinental (ICBM) lanzado desde territorio continental de Estados Unidos tardaría normalmente entre 20 y 30 minutos en alcanzar su objetivo en Rusia, tiempo suficiente para que un submarino en el muelle realizara los preparativos previos al lanzamiento y lanzara un ataque de represalia con sus misiles balísticos de lanzamiento marítimo (SLBM). Sin embargo, el posible despliegue y lanzamiento de ATACMS o PrSM por parte de Estados Unidos desde la zona de Ivalo, mucho más cercana a la Flota del Norte de Rusia, no dejaría tiempo para un ataque de represalia: los submarinos serían destruidos antes de poder lanzar sus SLBM.

Rusia podría mitigar la vulnerabilidad de su Flota del Norte ante un primer ataque de múltiples maneras. Por ejemplo, los submarinos de ataque de propulsión nuclear clase Yasen ^[3] podrían lanzar sus misiles de crucero de ataque terrestre Kalibr, con doble capacidad, antes de ser destruidos, ya que el tiempo de preparación previo al lanzamiento de estos misiles es significativamente menor que el de los SLBM. (Rusia opera actualmente cinco submarinos de la clase Yasen y cuatro están en construcción). Sin embargo, debido a su menor alcance, los misiles Kalibr lanzados desde submarinos anclados solo alcanzarían objetivos en las regiones septentrionales de Suecia, Noruega y Finlandia . Los sistemas de misiles de crucero más recientes, como el misil hipersónico Zircon, podrían alcanzar un objetivo más distante, pero aun así no representarían una amenaza para el territorio continental de Estados Unidos.

La mayor vulnerabilidad de las regiones rusas de Múrmansk y Olenegorsk ante un posible ataque estadounidense o de la OTAN implica que un lanzamiento de misiles ATACMS o PrSM desde la zona finlandesa de Ivalo podría tener el efecto acumulativo de un ataque de desarme contra las fuerzas estratégicas del norte de Rusia. Además de las bases navales y los submarinos en el muelle, los bombarderos estratégicos rusos en los aeródromos de Olenya y Severomorsk-3 también corren un mayor riesgo.

El despliegue por parte de Estados Unidos de sistemas avanzados de misiles balísticos de corto alcance en las regiones de Finnmark (Noruega) o Laponia (Finlandia) podría provocar una crisis similar a la crisis de los misiles de Cuba de 1962, aunque esta vez en sentido contrario. Si Rusia detecta la presencia de misiles estadounidenses en estas regiones, la tensión se dispararía con mayor probabilidad, y Moscú probablemente advertiría a Washington para que retire inmediatamente estos misiles o se exponga a un ataque.

Los acuerdos de cooperación en materia de defensa que Estados Unidos firmó con los países del norte de Europa ciertamente han impulsado los intereses de seguridad de Estados Unidos. Sin embargo, su implementación podría conducir a una situación más peligrosa, en la que las fuerzas convencionales —no limitadas por ningún acuerdo— podrían alterar el equilibrio efectivo de fuerzas estratégicas en la región.

Muchos estrategas militares rusos consideran positiva la incertidumbre en las relaciones entre los miembros de la OTAN y Washington por la guerra en Ucrania y las intenciones de Trump de distanciar a Moscú de Pekín . Sin embargo, Moscú no debería distraerse demasiado ni adoptar un comportamiento aún más provocador. Estados Unidos tiene ahora más influencia sobre las fuerzas estratégicas rusas que antes de la guerra en Ucrania.

Notas

^[1] Вячеслав Зиланов. 2019. “Зиланов: По договору с Норвегией 2010 года Россия потеряла около 80 тысяч километров своей территории” ИФ Realista , 12 de junio. https://realtribune.ru/news-world-2110/ ; Véase también https://arcticreview.no/index.php/arctic/article/view/1675/3229

^[2] En 2024, Noruega y Estados Unidos acordaron instalaciones y áreas adicionales en virtud del Acuerdo Suplementario de Cooperación en Materia de Defensa de 2022. https://www.regjeringen.no/en/aktuelt/norway-and-usa-agree-on-additional-agreed-facilities-and-areas-under-the-sdca/id3023830/

^[3] Алексей Рамм, Богдан Степовой. 2019. Не отходя от пирса: пришвартованная подлодка провела пуски «Калибров» Известия , 28 de marzo https://iz.ru/858192/aleksei-ramm-bogdan-stepovoi/ne-otkhodia-ot-pirsa-prishvartovannaia-podlodka-provela-puski-kalibrov ; Véase también: https://www.thebarentsobserver.com/security/russian-sub-launched-cruise-missile-without-leaving-port/156157