Phar Kim Beng (ASIA TIMES), 30 de Septiembre de 2025
Los aranceles del 100% de Trump a las farmacéuticas pueden aumentar su base política, pero implican el riesgo de enfermedades globales, desigualdad en la salud y una innovación farmacológica sofocante.

Cuando el presidente estadounidense, Donald Trump, anunció un arancel del 100% sobre los productos farmacéuticos de marca importados a partir del 1 de octubre de 2025, los mercados de toda Asia temblaron.
Las acciones de las principales farmacéuticas de India, Japón y Australia perdieron miles de millones de dólares en cuestión de horas. Pero si bien los inversores fueron los primeros en sentir el impacto, el verdadero coste del berrinche arancelario de Trump recaerá sobre los pacientes, precisamente quienes dependen de un acceso oportuno y asequible a los medicamentos.
La Casa Blanca ha defendido la medida como una forma de relocalizar la producción, alegando la seguridad nacional y el imperativo de «Estados Unidos Primero» . Las empresas que han comenzado a construir plantas en Estados Unidos podrían estar exentas.
Pero la realidad práctica es cruda: los medicamentos no son aparatos. Reubicar o construir nueva capacidad de fabricación farmacéutica puede llevar de cinco a diez años, no meses. Mientras tanto, la escasez y el aumento vertiginoso de los precios son inevitables.
En Tokio, Sumitomo Pharma perdió más del 4% de su valor de mercado, mientras que la australiana CSL se desplomó a su mínimo en seis años . Gigantes indios como Sun Pharma y Wockhardt también experimentaron fuertes caídas , lo que refleja el temor a una contracción del mercado estadounidense. Sin embargo, estas fluctuaciones financieras son solo la punta del iceberg.
Para los pacientes, especialmente aquellos que requieren tratamientos especializados para el cáncer, enfermedades autoinmunes o trastornos raros, un arancel del 100% significa que medicamentos que salvan vidas se volverán prohibitivamente caros.
Las aseguradoras de salud pueden absorber parte del impacto en los países ricos, pero en las naciones en desarrollo o entre las comunidades marginadas , los aumentos de precios se traducen directamente en enfermedades no tratadas y muertes prematuras .
El coste humano más allá de los balances
El sector farmacéutico es diferente al textil o al del mueble. Cada medicamento es el resultado de años de I+D , aprobación regulatoria y una cuidadosa calibración. Si los exportadores se retiran del mercado estadounidense o si las cadenas de suministro se fracturan , las repercusiones serán globales. Una pequeña interrupción en un país puede derivar en escasez en varias regiones.
La Organización Mundial de la Salud ha advertido desde hace tiempo que el acceso a los medicamentos no es solo un problema económico, sino un derecho humano fundamental . La medida de Trump corre el riesgo de agravar las desigualdades sanitarias mundiales, especialmente porque las poblaciones de bajos ingresos serán las más afectadas.
Además, cada dólar que las empresas desvían de la investigación hacia estrategias de elusión arancelaria es un dólar menos para descubrir la próxima generación de curas. A largo plazo, los aranceles podrían frenar la innovación médica, con consecuencias que trascienden los titulares de hoy.
El momento también es propicio. Trump impuso simultáneamente nuevos aranceles a camiones y muebles , lo que desató el temor de otra guerra comercial.
China, India y la UE podrían responder con medidas de represalia. En el sector farmacéutico, donde las cadenas de suministro están globalizadas —desde los ingredientes farmacéuticos activos (API) en China hasta los ensayos clínicos en India y los centros de investigación en Europa—, los aranceles de represalia no dejarán a ningún país indemne.
Para el Sudeste Asiático, hay mucho en juego. Malasia, Tailandia y Singapur son centros clave en el envasado , la distribución y la logística de medicamentos. Cualquier interrupción podría socavar no solo las exportaciones, sino también la seguridad sanitaria nacional.
En un momento en que la ASEAN está tratando de reconstruir su resiliencia después de la pandemia , la cruzada arancelaria de Trump agrega otra capa de incertidumbre.
Algunos analistas creen que la cifra del 100% es un engaño , una apertura maximalista diseñada para obtener concesiones. Quizás sea así. Pero incluso si los aranceles se reducen posteriormente, el daño ya está hecho. Los mercados están conmocionados, las decisiones de inversión están congeladas y las juntas directivas farmacéuticas están recalibrando sus estrategias de suministro.
El riesgo más peligroso es que el comercio se convierta en rehén del teatro electoral, y que vidas humanas reales se consideren daños colaterales. En su afán por conseguir votos en el Medio Oeste estadounidense, Trump podría estar creando una hambruna mundial de drogas que perjudicará a las poblaciones más vulnerables del mundo.
Llamado a un liderazgo responsable
La lección de esta crisis es simple: los medicamentos no pueden considerarse meras monedas de cambio en las guerras comerciales. Son bienes públicos, esenciales para la dignidad y la supervivencia de millones de personas. Los aranceles en este sector no son palancas abstractas de política económica, sino armas contundentes que hieren la carne de la humanidad.
La ASEAN, que se prepara para su Cumbre de Asia Oriental en Kuala Lumpur , debe aprovechar esta oportunidad para abogar por la exención de los productos farmacéuticos vitales de todas las hostilidades comerciales. Malasia, como país presidente, tiene el deber moral de insistir en que la seguridad sanitaria se reconozca, junto con la seguridad energética y alimentaria, como un bien común mundial.
Los aranceles de Trump podrían fortalecer su base política, pero el costo a largo plazo se medirá en enfermedades sin tratar, el aumento de la desigualdad y una desaceleración de la innovación farmacéutica. El mundo no puede permitirse que las rabietas arancelarias se antepongan a la salud humana.
Phar Kim Beng (PhD) es profesor de estudios de la ASEAN en la Universidad Islámica Internacional de Malasia y director del Instituto de Estudios Internacionales y de la ASEAN (IINTAS).
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