Gaceta Crítica

Miranda Cleland 7 de diciembre de 2023

Israel sigue siendo el único país del mundo que procesa automática y sistemáticamente a niños en tribunales militares. Sin embargo, los líderes mundiales no dicen nada

Las fuerzas de seguridad israelíes detienen a un joven palestino durante una manifestación frente a la mezquita de Al Aqsa en la Ciudad Vieja de Jerusalén el 17 de julio de 2017 (AFP)

En los últimos días, las autoridades israelíes han liberado a decenas de niños palestinos prisioneros a cambio de rehenes israelíes retenidos por Hamás.

Mucha gente en todo el mundo parece preguntarse, quizás por primera vez, ¿por qué Israel encarcela a tantos niños palestinos?

Desde la Segunda Intifada, en 2000, cuando Defensa de los Niños Internacional – Palestina  (DCIP) comenzó a rastrear a los niños palestinos detenidos por el ejército israelí, las fuerzas israelíes han detenido, interrogado, procesado y encarcelado a aproximadamente 13.000 niños palestinos .

Cada año, el ejército israelí detiene entre 500 y 700 niños palestinos .

Todos los palestinos en la ocupada Cisjordania, incluidos los niños, han estado sujetos a la ley militar israelí desde 1967, cuando Israel la anexionó.

Sin embargo, los colonos israelíes que viven en el mismo territorio están sujetos a la ley civil israelí, un claro ejemplo de apartheid.

A pesar de que las normas internacionales afirman que los civiles, incluidos los niños, nunca deben comparecer ante tribunales militares, Israel sigue siendo el único país del mundo que procesa automática y sistemáticamente a niños en tribunales militares.

Tortura

Estos niños, que son casi todos varones, tienen edades comprendidas entre los 12 años (la edad de responsabilidad penal según la ley militar israelí) y los 17 años, aunque el DCIP ha documentado casos en los que niños menores de 12 años fueron detenidos y acosados ​​por las fuerzas israelíes durante horas.

Según el derecho internacional, un niño es cualquier persona menor de 18 años.

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Entre 2016 y 2022, DCIP recopiló declaraciones juradas de 766 niños palestinos detenidos por el ejército israelí y procesados ​​en tribunales militares israelíes para rastrear sus experiencias de malos tratos y torturas a manos de las fuerzas israelíes.

Gracias a esos datos, podemos decir con seguridad que negar los derechos humanos básicos de los niños palestinos es algo habitual para las fuerzas israelíes.

En la llamada Guerra entre Israel y Palestina los niños palestinos liberados dicen que sus compañeros de prisión fueron «torturados hasta la muerte»

Tres de cada cinco de estos niños son detenidos en sus casas en plena noche, según documentación recogida por DCIP. Las fuerzas israelíes se presentan en la casa de una familia palestina a las dos o tres de la mañana, derriban la puerta, despiertan a toda la familia y sacan al niño de su cama.

En ese momento, el 75 por ciento de los niños experimentan algún tipo de violencia física a manos de los soldados israelíes. 

Después de eso, a casi todos los niños se les vendan los ojos y se les atan las manos antes de ser obligados a subir a un vehículo militar israelí de camino a un centro de interrogatorios, a menudo situado en un asentamiento israelí ilegal. Durante este tiempo, los padres de ese niño no tienen idea de adónde lo llevarán ni cuándo volverá a casa.  

Al llegar a un centro de interrogatorio israelí, el 80 por ciento de los niños son registrados al desnudo por soldados israelíes. Luego, un interrogador israelí adulto, que habla árabe experto, interroga al niño sin la presencia de un familiar o un abogado.

De hecho, según la ley militar israelí, no existe el derecho a un abogado durante los interrogatorios. Dos tercios de los niños no están adecuadamente informados sobre sus derechos y el 55 por ciento se ve obligado a firmar documentos en hebreo, un idioma que no entienden. 

Detenido sin cargos

Los interrogadores israelíes colocan a uno de cada cuatro niños en régimen de aislamiento antes del juicio con el fin de obtener una confesión, un método considerado tortura por las Naciones Unidas. 

Todo esto ocurre antes de un juicio, también llevado a cabo por soldados israelíes en un tribunal militar. La tasa de condenas es superior al 95 por ciento , una cifra que dice todo lo que se necesita saber sobre el interés del ejército israelí en la justicia.

El cargo más común contra niños es el de arrojar piedras, que conlleva una pena máxima potencial de hasta 20 años. 

Los interrogadores israelíes colocan a uno de cada cuatro niños en régimen de aislamiento antes del juicio con el fin de obtener una confesión, un método considerado tortura por las Naciones Unidas.

Sin embargo, muchos palestinos, incluidos niños, son detenidos por el ejército israelí sin cargos ni juicio, lo que significa que permanecen indefinidamente en prisiones militares israelíes, una práctica conocida como detención administrativa.

El sistema de detención militar israelí, en todos sus aspectos, está diseñado para ejercer un control total sobre los niños palestinos y sus familias. Desde el momento en que los soldados israelíes irrumpen en la casa de una familia palestina en mitad de la noche, los niños saben que sus padres no pueden mantenerlos a salvo. 

Si bien muchos niños palestinos han sido liberados de prisiones israelíes esta semana, las fuerzas israelíes han estado ocupadas realizando redadas y arrestos todas las noches en toda la Cisjordania ocupada.

Incluso con el mundo entero observando, la brutalidad militar israelí opera con impunidad, como un reloj, envalentonada por el asesinato de más de 6.000 niños palestinos en Gaza, y sólo un puñado de líderes mundiales los exigen responsabilidades.

Miranda Cleland es miembro de varias organizaciones de defensa de los niños palestinos en Defensa de los Niños Internacionales y vive en Washington, DC, donde aboga por los derechos humanos de los niños palestinos. Tiene una licenciatura con honores de la American University en Estudios Internacionales y lengua árabe. Este artículo ha sido publicado originalmente en el medio Middle east eye.

Gaceta Crítica, 8 de Diciembre de 2023